Fuente: La Jornada Guerrero
“Aunque a muchos les moleste y hablen mal de nosotros, sabemos que nuestras luchas son pacíficas y justas, pues la razón está de nuestro lado”, sostuvo Cenobio Chávez Quiroz, presidente del Consejo de Pueblos Unidos en Defensa del Río Verde (Copudever), organización oaxaqueña conformada por pobladores de seis municipios de la sierra sur y costa de Oaxaca con el objetivo de impedir la edificación de la presa hidroeléctrica Paso de la Reyna, en el río Verde de aquella entidad, proyecto impulsado por la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Entrevistado en la comunidad de Salsipuedes, en los Bienes Comunales de Cacahuatepec, en la zona rural de Acapulco, donde este sábado iniciará la séptima Asamblea Nacional de afectados ambientales, Chávez Quiroz recordó que en 2007 habitantes de más de 60 comunidades oaxaqueñas iniciaron la defensa formal de su tierras, luego de que la CFE anunció públicamente la intención de construir un embalse, obra que afectaría de manera indirecta a 97 mil personas y de manera directa a 15 mil, originarias de Santiago Ixtayutla, Santa Cruz Zenzontepec, Santiago Tetepec, Santiago Jamiltepec, Tataltepec de Valdes y Tututepec de Melchor Ocampo, municipios habitados por pueblos mixtecos y chatinos.
El representante del Copudever comparó su lucha con la del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la presa La Parota (Cecop) y señaló que la estrategia de defensa elegida para proteger su patrimonio es la más limpia y favorable, pues “hemos tenido mucha provocación de los gobiernos, de la policía, pero hemos resistido con mucha paciencia, la resistencia siempre ha sido pacífica”.
Manifestó que “el Cecop está haciendo una labor muy fuerte, aunque es muy sufrida, muy golpeada, pero de esta manera se da a conocer la inconformidad de los pueblos. No es posible que gente de afuera venga a quitarnos lo que es nuestro. Desde hace muchos años las empresas entran sin consultar a nadie. El pueblo puso al gobierno federal, no las empresas”. Cenobio Chávez calificó como positivo intercambiar experiencias de lucha y defensa, así como conocer lo que pasa en el interior de las comunidades, donde mencionó, el gobierno ha cometido infinidad de violaciones.
“La autoridad saca las riquezas de los poblados, cuando el recurso debe ser invertido en las comunidades, hoy los pueblos siguen pobres, ahora que estoy aquí me doy cuenta de que en Guerrero y Oaxaca estamos en el mismo nivel de pobreza y esto no se vale”. Subrayó que “no somos diferentes, somos mexicanos y hermanos, hijos del mismo Dios; no nacimos porque quisimos en estos territorios, sino porque Dios destinó esta raza a esta tierra de México que es tan rica”.
Roberto Gregorio, integrante de Copudever, señaló que “sabemos que estamos defendiendo nuestros derechos y no vamos a dejar jamás que nadie nos quite lo nuestro, porque eso no trae ningún beneficio, no será una lucha a la mala, sino pacífica”.
León Alberto Pérez Manzanero, miembro de la agrupación Tonelhuaytzin nuestra raíz, sostuvo que el conflicto comienza cuando no se toma en cuenta a los pobladores originarios, y se pretende imponer proyectos contra su voluntad.
Este sábado a las 9:30 de la mañana se efectuará la inaguración de la asamblea en Salsipuedes, con la intervención de integrantes del Cecop y un informe de actividades del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, de la situación actual del conflicto por el proyecto La Parota y el estado de la Policía Comunitaria.