Fuente: Noticias Voz e Imagen

Autoridades municipales y comunales de Capulálpam de Méndez demandaron ayer el cese definitivo de las actividades de la minera «Natividad» y la cancelación de todas las concesiones otorgadas en la región de la Sierra y en el estado de Oaxaca, debido a que estos proyectos han afectado los manantiales de agua con los que la comunidad cuenta, dañando severamente los ecosistemas.

La exigencia es retomada debido a que hace unos días, las autoridades comunales recibieron una minuta de trabajo que corresponde a una reunión de la empresa Minera «Teocuitla» y la Procuraduría Agraria.

En el documento, la empresa solicitaba «un acercamiento con representantes de la comunidad de Capulálpam de Méndez, para exponerles de manera clara y precisa de qué se trata la minería moderna», en ella también pedían una asamblea para que se autorizara un contrato de exploración, situación que los pobladores desaprobaron y catalogaron.

Si bien las actividades en la minera datan de 200 años atrás, de acuerdo con Rodolfo Hernández Cosmes, secretario del Comisariado de Bienes Comunales, el deterioro de los ecosistemas locales se ha agudizado desde el año 2002, con la incursión de la mina «Natividad», pues esta ha dañado severamente la ecología de la región.

Cabe destacar que la Asamblea General de Comuneros de Capulalpam ratificó su decisión de no apoyar la explotación minera en su territorio el 10 de abril del año 2011, en virtud del análisis del deterioro ecológico que los pobladores han registrado.

En el año 2006 los trabajos de la minera «La Natividad» y Anexas fueron cesados por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente PROFEPA, sin embargo, desde ese entonces, las autoridades estatales y federales, nada han hecho para exigir a la empresa canadiense la reparación de daños, aseguraron los inconformes.

Las autoridades municipales encabezadas por Néstor Baltazar Hernández, también demandaron la intervención del gobierno estatal pues aseguran que éste «les ha dado la espalda» toda vez que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) les ha negado información sobre un procedimiento administrativo de la minera «La Natividad» y anexas así como sus filiales canadienses, en la cual se contemplaba la cancelación temporal de la mina.

Asimismo acusaron a la Procuraduría Agraria de haber iniciado negociaciones con la empresa minera, para que dentro de un programa denominado «FIPP», las tierras puedan seguir explotándose.

Cabe destacar que del 2004 al 2006, más de 50 mil hectáreas de concesiones mineras fueron otorgadas a la empresa canadiense «Continuum Resources» en terrenos comunales de la sierra. Esta empresa se asoció con la compañía minera de «la Natividad», quién desde el siglo XIX comenzó la explotación de de oro y plata.

Como resultado de esta actividad desaparecieron 13 manantiales. Mientras que la minera «Natividad» se posesionó de terrenos comunales de Capulalpam para colocar sus desechos. Se solidarizan con San José del Progreso Asimismo los inconformes se solidarizaron con la localidad de San José del Progreso Ocotlán, en donde hace unos días Bernardo Vásquez, líder opositor a la mina Cuzcatlán, fue asesinado. «Todos somos defensores de los derechos… la muerte de un compañero nos afecta bastante porque entre todos estamos organizados y es como si nos mataran a un familiar porque somos una hermandad» denunció Rodolfo Hernández Cosmes.

«Una comunidad sin agua no tiene vida y así las generaciones futuras no tendrían con qué subsistir, más el día de hoy que es el día internacional del agua», reclamaron las autoridades de Capulalpam de Méndez.